El cheescake austríaco es una combinación de la típica torta de queso con el sabor intenso del chocolate negro y del cacao amargo. Un postre simplemente irresistible con una textura perfecta.
Cheescake austríaco

El cheescake austríaco es una combinación de la típica torta de queso con el sabor intenso del chocolate negro y del cacao amargo. Un postre simplemente irresistible con una textura perfecta.
Una cheescake de chocolate y vainilla con dos riquísimos sabores combinados. Rinde 8 porciones de puro placer dulce. Bien esponjosa, suave, con una textura increíble. Para comenzar saboreando con los ojos y comer sin parar.
¡Esta cheescake de chocolate blanco con frambuesa es una locura! Todo el sabor potente del chocolate y el dulzor agrio de las frambuesas. Una combinación increíble en un postre que rinde 10 a 12 porciones y no lleva horno.
Una rosca rellena con frutas riquísima y llena de sabor y color. Con las frutas abrillantadas, glaseadas y las pasas de uva negras y rubias no se pierdan la oportunidad de tener una rosca como las de confitería pero hecha en casa.
También conocida como carrot cake esta torta de zanahoria y chocolate blanco es una combinación deliciosa de ingredientes que tienen como resultado un plato suave y esponjoso. Muy rica para una merienda especial, es una receta de repostería muy fácil, justo para los que buscan postres caseros amables pero con algo de originalidad.
La tarta de queso y arándanos es un postre liviano, saludable y, sobre todo, muy fácil de hacer. De preparación rápida, nos saca de un apuro con muy pocos ingredientes. Además cuenta con el plus de los frutos rojos como lo es el arándano, con todas sus propiedades nutritivas y beneficiosas para nuestra alimentación. Una receta de repostería clásica que podemos hacer en nuestra cocina con el sabor de lo casero. Para comer fría, tibia o natural este postre se adata a todas las estaciones del año. Una oportunidad increíble de mezclar texturas y colores en un plato riquísimo.