Los paquetitos de frutillas son una opción rápida y fácil para realizar en cualquier momento.
Realmente el tiempo que tardan en hacerse es mínimo, y el resultado es tan delicado y delicioso que termina siendo una receta adaptable a cientos de ocasiones.
No hace falta esperar a una ocasión especial. Cualquier día amerita unos ricos bocaditos para alegrar a los seres queridos de la manera más dulce.
Receta para realizar paquetitos de frutillas
Ingredientes
- 300grs. de frutillas
- 100grs. de azúcar
- Ralladura de 1 limón
- 12 tapas para empanadas de copetín
- Azúcar impalpable para decorar
Preparación
El primer paso para hacer estas delicias va a ser lavar y sacarle los cabitos a las frutillas.
Secar las frutas, cortarlas a la mitad y espolvorearlas con el azúcar y la ralladura de limón.
El efecto de este procedimiento será que las frutillas expulsen sus jugos. Por eso es necesario dejarlas macerar de esta manera mientras seguimos con la otra parte de la receta.
Ahora, habrá que hacer los envoltorios de estas frutillas.
Para ello, vamos a disponer sobre la mesada las 12 tapas de masa de copetín, que tranquilamente puede reemplazarse por masa philo, uniendo varias capas con pinceladas de manteca derretida para darle más volumen a la masa que será contenedora de las frutillas bien jugosas.
Cuando hayamos decidido la mejor opción de masa, comenzaremos con el armado.
Sobre cada tapa, colocar una cucharada de las frutillas ya maceradas, y llevar hacia arriba los bordes para cerrar el paquete haciendo presión con la yema de los dedos.
Sobre una placa enmantecada, ir disponiendo los paquetitos con la unión hacia abajo. De esta manera vamos a lograr una forma pareja y prolija.
Una vez acomodados, pintarlos con manteca derretida y espolvorearlos con azúcar.
Llevar los paquetitos listos al horno, que debe estar precalentado a 180°.
La cocción tardará unos 30 o 35 minutos, y la masa se verá dorada y crocante.
Ni bien salidos del horno, hay que espolvorearlos con abundante azúcar impalpable y esperar a que enfríen para poder llevarlos a una linda fuente de presentación, prolijamente dispuestos para comenzar a disfrutarlos.
Estos paquetitos de frutillas quedarán con una forma muy tentadora, y posiblemente, en cuanto prueben uno, harán desaparecer la torre en cuestión de minutos.